La guardia civil logró localizar la pasada madrugada al anciano que el viernes se perdió en las inmediaciones de la localidad en la que vive, Villarobles de Arriba. Fuentes cercanas han confirmado que el hombre se encuentra en perfecto estado de salud, aunque hambriento y con leves signos de hipotermia. Los hechos se remontan al pasado viernes, cuando Saturnino Rey, cazador de la localidad, se dirigía a una partida del municipio a la que llaman "El quinto pino". "Llegar allá siempre ha sido fácil", nos cuenta uno de los vecinos de Villarobles, "sólo hay que tomar el camino ancho y ir contando pinos hasta que llegues al número cinco, y ya estás. Por aquí no abundan mucho". Sin embargo Saturnino, a pesar de que conocía bastante bien el terreno, terminó por pasarse tres pueblos y llegar a Villalcornoque de abajo; cosa que tiene desconcertadas a las autoridades.
Miembros del colectivo ecologista sostienen, sin embargo, que la posible causa hay que buscarla en las últimas lluvias del año pasado y en los recortes que la diputación está realizando. Y es que según Alberto Pillo, coordinador de "La zarigüeya verde", periódico ecologista del lugar, ya no basta con contar pinos para llegar al destino. "La cuestión es que el último pino se murió después de los temporales de lluvia del año pasado, y como no daba para comprar otro pues plantaron un ciprés, que da el pego. Así que si hace tiempo no pasas por ahí es fácil pasarte de largo buscando un pino que ya no existe".
El ayuntamiento ya ha ordenado que sea trasladado el árbol de navidad, pero que se mantengan las luces, que servirán de indicador, porque, según palabras del alcalde "la seguridad de los vecinos es lo primero, y hay que ingeniárselas en tiempos de crisis".
Desde Villarrobles de arriba, viendo plantar un pino, Fran Xapa para La Retaguardia
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