El Ministerio de Sanidad ha hecho público esta mañana el informe en el que
se detalla la incidencia en la población del día de san Valentín. Los datos han
sido bastante reveladores, especialmente en comparación con otros años en los
que se ha notado algo de influencia de la crisis, e incluso las tendencias de
moda. La principal conclusión que han sacado los expertos es que ha aumentado
en un punto y medio la tasa de hiperglucemias, especialmente las que no se
deben al consumo de azúcar, o “pasivas”. Josele Namorado, doctor especialista
que ha trabajado en el informe, ha explicado a nuestra redacción las
principales conclusiones:
“Antes que nada debo aclarar que apenas ha habido novedades respecto otros
años, y que no se ha notificado ningún caso grave; por ejemplo no se ha dado ningún
caso de coma hiperosmolar. Apenas alguno de cierta entidad, debido a las
circunstancias del sujeto: normalmente responden a un patrón de persona de
avanzada edad con problemas derivados como la diabetes. Sin embargo sí preocupa
un poco el aumento del que llamamos “consumidor pasivo”: aquel que sufre los
síntomas después de haber mirado detenidamente algún escaparate especialmente
recargado, y de color rosa”. Sin embargo no son las únicas consecuencias del
día de San Valentín. Josele nos cuenta que hay otro tipo de dolencias que se
dan todos los años, aunque no se habla demasiado de ellas: “Las contracturas en
la espalda, por ejemplo, derivadas de un mal descanso en una superficie no apta
para dormir, por como un sofá. Cada año hay un ligero aumento, pero nada
alarmante. Sí preocupa un poco la cuestión de los “sufridores en silencio”:
personas, la mayoría del género masculino, que deciden no acudir a los
especialistas por no dar la suficiente importancia a la lesión, o simplemente
por vergüenza. Lo mismo pasa con las tendinitis en los antebrazos, en este caso
muy repartidas entre hombre y mujer. Durante esta época aumenta el número de
casos. Aquí hombres y mujeres van a la par: Los dos la ejercitan mucho”.
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Detenerse durante más de tres segundos delante de un escaparate como este puede ser muy peligroso para la salud |
Ante estas situaciones hemos preguntado al profesor Namorado qué se
recomienda hacer, y su respuesta ha sido muy clara: “Lo más importante, como en
casi todo lo referente a la salud, hay que tomar las medidas preventivas
necesarias y evitar las causas que pueden provocar este tipo de dolencias. Por
ejemplo, algo que no hace mucha gente: cuando vea un escaparate de color rosa
chillón y corazones por todas partes, no lo mire más de tres segundos. Y si
puede, con gafas de sol. También es importante tomar otras precauciones. Por
ejemplo, el 40% de las contracturas cervicales de San Valentín están originadas
por una baja incidencia, incluso ausencia, de contraprestación material; vamos,
que no hay regalo. Otro 35% viene derivado de otras dolencias, como la amnesia
selectiva; y un 10% por una disfunción en el subconsciente que provoca el decir
el nombre equivocado en el peor momento. Si se controlan estas causas, se baja
significativamente el riesgo de dejarte la espalda en un “cheslón”. Por lo que
respecta a la tendinitis en antebrazos, lo mejor es repartir la carga de
trabajo entre ambos brazos. Ya sabes, un día usas una manita, otro día la otra.”
Desde la redacción nos tomamos muy seriamente los consejos del doctor.
Para La Retaguardia, Fran Xapa